A los Ángeles, por norma general, les encanta que les regales bendiciones con frutas y azúcar. Son mimosos, no es exceso, pero sí aman que los tengas en cuenta. Es importate que escojas bien lo que quieres ponerle y que la fruta no esté excesivamente madura, para que no se estropee pronto.
El azúcar así como los dulces son un icono simbólico de gracias, ya que a ellos también les encantan estos alimentos. Los ángeles saben potenciar su presencia, creando aromas de flores y especias como la canela. Ahora, sin embargo, tú podrás llamarlos y expresarles tus bendiciones con frutas tales como los cocos partidos a la mitad, las naranjas, las papayas y mangos de ración o los terrones de azúcar.
Puedes dejarles una ofrenda cada mes y de este modo, acompañar esas ofrendas de rezos. Las personas más devotas, incluso elegirán a su Ángel preferido, tomará la imagen si hay en la Iglesia cercana y lo paseará en manera (también) de ofrenda para cuidar de los demás y aportarles felicidad.
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